martes, 3 de agosto de 2010

Una romería

Hace unos días fui a una romería. Fue en una iglesia cerca de mi casa que llaman "A Pequena", por su tamaño, y la romería era en honor a San Salvador. Las romerías suelen ser, por acá, un momento de encuentro de los vecinos de las aldeas que aprovechan la fiesta religiosa para comer juntos. En este caso, ponen un toldo muy grande en un prado cerca de la iglesia. Bajo ese toldo arman un bar, mesas para comer y una cocina.


En la cocina preparan churrasco (costillas de cerdo asadas) y pulpo
Anima la comida un grupo en vivo, en este caso el Trío Lembranza. Suelen hacer música para bailar como pasodobles, salsa, merengue y música del verano. Aquí se están preparando para cuando la gente, después de la misa, venga a tomar el aperitivo y a comer.
Un aperitivo antes de la misa
Los platos de madera para servir el pulpo
Por el camino hacia la iglesia
Esperando a que llegue el cura para empezar la misa
El interior de A Pequena. En esta iglesia no se celebran misas. Tampoco hay ninguna imagen porque hace unos años un cura decidió vender todo lo que había porque necesitaba dinero para sus gastos personales. Desde ese momento solo se celebra esta romería allí.
Una estampa muy común por acá: los hombres fuera de la iglesia, fumando, charlando y esperando a las mujeres que están dentro de la iglesia participando de la misa
Después de la misa entran algunos hombres y sacan en una mini procesión la imagen de San Salvador, le dan una vuelta alrededor de la iglesia, tiran cañitas voladoras (fuegos artificiales con ruido) y lo vuelven a meter en la iglesia. De esa manera termina la parte religiosa de la romería
Todos vuelven al prado donde está el toldo y se acercan a la barra del bar a tomar el aperitivo (vermú, le llaman)
Y van ocupando sus lugares en las mesas previamente reservados
Mientras esperan la comida y toman el aperitivo la orquesta toca y algunos se largan a bailar.

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